“El hombre SABIO es motivado por ser mejor que él mismo, no por ser mejor que los demás”
El hombre sabio no está en competencia con los demás. Está en competencia con su “yo” del pasado. Siempre se propone ser mejor, superar sus propias limitaciones y alcanzar metas cada vez más altas. Al ver el triunfo de otros, solamente es inyectado de fe e inspirado a ser mejor que su versión de ayer.
Te invito a leer mi artículo “Tu puedes ser mejor”