“Emocional, racional, hormonal o viceral, cada uno en su momento es bueno”  Ben Sánchez

“El que es dueño de sus emociones es dueño de su vida” Ben Sánchez

Todos tenemos diferentes parámetros para tomar decisiones, para reaccionar o para definir nuestro comportamiento. Si bien es cierto que todos actuamos racionalmente, somos emocionales, hormonales y viscerales, también es cierto que tenemos una tendencia a utilizar uno de estos factores como nuestra manera común ante reacciones y decisiones o selección de prioridades. 

Cada uno de estos  tiene sus ventajas, desventajas, y sus momentos. Cuál de estos utilizamos dependerá de varios factores: 

El lugar, la situación, la persona, la relación con la persona, el interés o la intención, nuestro estado emocional nuestro temperamento y nuestro nivel de desarrollo emocional. 

El hormonal:

Las reacciones de estos individuos usualmente responden a los impulsos hormonales y son dependientes exclusivamente de la influencia de las mismas. Sus reacciones y decisiones no obedecen a otros factores dándole prominencia al estado hormonal del momento.

El emocional:

En muchas ocasiones se relaciona con el hormonal, pero también con el estado mental o de pensamientos. Reacciona o toma decisiones aceleradas basadas en lo que se siente bien o se siente mal en el momento. No se da tiempo para pensar en las consecuencias en muchas ocasiones permanentes. Usualmente responde sin pensar a sus pasiones a los momentos  que llenan sus vacíos emocionales cerrando los ojos a la razón. 

El visceral:

Este usualmente responde al instinto animal, al instinto de conservación, de dominancia o control. Responde a sus temores conscientes o inconscientes, desde el hambre o más bien desde lo que el hambre le representa. La necesidad animal de reproducción. 

El racional:

Por último mencionó al que parece cuerdo mientras que le permite a la razón privarle de los placeres de la vida, de muchas satisfacciones. Sus decisiones usualmente basadas en el interés, la conveniencia, la ética y su moralidad. Usualmente sintiéndose como el único correcto tiende a autonombrarse como el juez de los demás. Se posiciona para líder y se le permite se auto nombra. Disfruta de la admiración, el reconocimiento pero sobre todo del control u la autoridad. 

En resumen, todos tenemos algo de todos y al menos desde mi punto de vista esta bien, si lo hacemos con cordura, en el momento y la actitud correcta. Es sabio entender cuál es nuestra tendencia para no extremar privandonos de los placeres pero también de la cordura de la vida.